COMUNICACIÓN ASERTIVA CON ADOLESCENTES
Durante la adolescencia no sólo comienzas a cambiar físicamente, poco a poco te vas dando cuenta de que ya no piensas igual que tu papá o tu mamá, cada vez que te regañan sientes esa necesidad de explicar que fue lo que sucedió o simplemente hacerles saber que están en un error, sin embargo cada vez que lo intentas las cosas se ponen peor, tu mamá o papá te regañan más y sientes como si entre ustedes creciera un muro que es difícil atravesar.
Eso que sientes es normal, porque no solo tu cuerpo está cambiando, tu cerebro y la forma en que interpretas lo que sucede a tu alrededor también es diferente, muchos te dicen “rebelde” o “rezongón”, lo cual no te gusta, es normal que te enojes o que te sientas triste, sólo es cuestión de aprender a comunicarte de una manera más adecuada y te darás cuenta de que puedes hablar con tus papás de muchas más cosas de las que te imaginas.
Antes de llegar a los tips para que puedas tener una mejor comunicación, vamos a hablar un poco sobre lo que es la comunicación y los tipos de comunicación que existen.
La comunicación básicamente es el acto mediante el cual transmitimos y recibimos información. Las formas de comunicación pueden ser de dos tipos:
- Comunicación verbal: es la que se basa en la palabra, puede ser de dos tipos: oral o escrita.
- Comunicación no verbal: es la que se transmite principalmente mediante la expresión corporal (gestos, contacto visual, postura, distancia del cuerpo entre la otra persona, etc.).
Es importante que recuerdes estas formas de comunicación, porque muchas veces no te das cuenta de que con tu lenguaje no verbal estas comunicando más de lo que haces con tu lenguaje verbal (palabras). Hagamos un breve ejercicio. Piensa ¿Cuántas veces mientras te regaña tu mamá pones los ojos en blanco? O ¿Tuerces la boca?
Ahora que lo pensaste un poco, te has dado cuenta de que también estas comunicando, aun cuando crees que no lo haces. Continuemos.
Existen tres diferentes formas de comunicarnos y a continuación te las voy a explicar.
- Comunicación pasiva. Este tipo de comunicación se da cuando NO expresas lo que quieres, sientes o piensas. Por ejemplo: Tu mamá te compra un pantalón que no te gustó, pero por temor a que se enoje no se lo dices, es más hasta usas el pantalón solo para complacerla.
- Comunicación agresiva. Este tipo de comunicación se da cuando expresas lo que sientes, quieres y piensas, pero lo haces mediante gritos, groserías o palabras que lastiman. Siguiendo con el ejemplo del pantalón utilizarías frases tales como: “hay mamá que feo, póntelo tu” o “ni creas que me voy a poner esa porquería”.
- Por último viene la Comunicación asertiva: este tipo de comunicación se da cuando expresas lo que sientes, quieres y piensas de una manera en la que respetas a los demás y no los dañas. Utilizando el mismo ejemplo puedes utilizar la siguiente frase asertiva: “mamá te agradezco que me hayas comprado este pantalón, solo que no me gustó ¿crees que lo podamos cambiar?
Date cuenta cómo la manera en que dices las cosas puede influir para que la persona con la que platicas reaccione de diferente manera. Muchas veces influye más el cómo se dice que lo que se dice.
Estos tres tipos de comunicación no sólo los utilizas en casa, sino que también los pones en práctica en la escuela, en casa de tu abuela o cuando sales con tus amigos. El cuidar la forma en que te expresas, te ayudará a tener mejores relaciones.
¿Ya identificaste como te comunicas? ¿Eres pasivo, agresivo o asertivo?
Sigamos.
Ahora que ya te diste cuenta del tipo de comunicación que utilizas te voy a dar unos tips para que puedas comunicarte de manera asertiva:
- Mira a los ojos cuando te hablen. No hay nada que moleste más a tus papás que el hecho de que te voltees para otro lado.
- Evita interrumpir. Muchas veces funciona primero escuchar y después dar tu versión.
- Evita gritar. En ocasiones te dirán cosas con las que te sientas enojado, pero si gritas sólo lograrás que tu mamá o papá grite también y eso no solucionará nada.
- Si te enojas evita contestar en ese momento. Espera a que pasé tu enojo para que puedas hablar sobre el tema. Algo que puede funcionar para que no contestes es poner la lengua entre tus dientes (no lo hagas fuerte, pues te puedes lastimar).
- Da tu opinión. Hazlo cuando te sientas tranquilo y habla sobre cómo te sientes con lo sucedido.
- Utiliza frases asertivas. Frecuentemente utilizamos frases como: por tu culpa, siempre me regañas, nadie me entiende, eres malo, nunca me crees, etc. El utilizar estas frases no habla sobre cómo te estás sintiendo. Para expresar cómo te sientes es mejor utilizar frases tales como: yo me enojo cuando…, me gustaría que…, me siento triste cuando…, me siento mal cuando…etc.
- Por último te sugiero llegar a acuerdos,
si te enojas con facilidad puedes proponerle a tu mamá y a tu papá que cuando te regañen te den la oportunidad de alejarte para que te tranquilices y posteriormente hablar de lo que sucedió. Cuando te alejes intenta escribir todo lo que estas sintiendo o pensando, eso te ayudará a que tu enojo disminuya más rápidamente; después de hacerlo lee lo que escribiste y verás las cosas con más claridad. No olvides romperlo y tirarlo a la basura.
Comienza a poner en práctica estos sencillos consejos y te darás cuenta de cómo la relación con tus papás comenzará a mejorar.